Descripción del juego:
Se trata de un juego de baraja española del que pueden tomar parte dos o más jugadores.
Objetivo del juego:
Se juegan tantas manos o juegos parciales como sea necesario hasta que uno de los jugadores alcance el número de manos ganadoras que se haya pactado al iniciar la partida. También puede jugarse a una sola mano, y el que la gane vence la partida.
En cada una de las manos el objetivo de cada jugador es el descarte: el primer jugador que consiga quedarse sin cartas, se llevará la mano y por tanto sumará un punto.
Desarrollo del juego:
Comienzo
Por sorteo se decide quién es el primero que reparte.
Este jugador barajará el mazo y lo dará a cortar al que está situado a su izquierda, tras lo cual distribuirá todas las cartas entre todos los jugadores, de una en una comenzando por el que está situado a su derecha (mano) y siguiendo en este mismo sentido.
Jugar las cartas
Empezará realizando movimiento el mano (a la derecha del que reparte), que lo hará descartándose de una, dos o tres cartas, según sea su deseo, que depositará vueltas del revés sobre la mesa, a la par que dirá en voz alta una combinación de cartas (todas del mismo número), que será la jugada que él afirma haber lanzado (por ejemplo, 2 doses, 3 reyes, etc.). El número de cartas que se afirma arrojar ha de ser el mismo que el de las cartas que realmente se echen pero, por el contrario, el jugador podrá mentir sobre las cartas concretas que ha lanzado.
Entonces el jugador situado a su derecha tiene dos opciones:
- creer como verdadera la combinación que afirmó tirar su adversario: en ese caso él mismo deberá simplemente echar más cartas sobre el montón (una, dos o tres), afirmando que son del mismo número que las del jugador anterior, pasando el turno al siguiente jugador, que tendrá a su vez las mismas opciones,
- por el contrario, puede no creer que la combinación de su adversario fuera cierta: en ese caso deberá decirlo y levantar las cartas del jugador anterior.
Si fuera verdad lo que afirmó haber echado aquél, el incrédulo deberá llevarse para sí todas las cartas del montón. Si por el contrario el incrédulo hubiera acertado en su apreciación, y efectivamente el jugador precedente hubiera mentido, será éste, el mentiroso, quien se llevará para sí todas las cartas del montón.
Comenzará a echar cartas nuevamente, con todo este proceso, el jugador situado a la derecha de quien hubiera sido castigado en la baza anterior llevándose las cartas.
Sacar cartas del juego
Cada vez que un jugador se lleve las cartas del montón central, por haber sido pillado en una mentira o por no creerse una verdad, deberá retirar y dejar fuera del juego en un montón a parte aquellos grupos de cuatro cartas del mismo número que tuviera entre las suyas, quedando estas cartas fuera del juego durante esa mano.
Una mano finaliza cuando un jugador consigue, en base a las reglas arriba explicadas, descartarse de todas sus cartas.
Gana la partida el jugador que consiga ganar el número de manos pactado al comenzar la partida.
TAREA
El trabajo consistirá en leer atentamente el instructivo del juego “MENTIROSO”, confeccionar las cartas y jugar.
1. Formen grupos de trabajo de no más de seis integrantes.
2. Lean atentamente el instructivo del juego “MENTIROSO”.
3. Confeccionen las 48 cartas en papel cuadriculado pegado en cartulina:
- dimensiones de cada carta: 3 cuadraditos de ancho por 5 cuadraditos de largo, con el número (del 1 al 12) y el palo (oro, basto, espada o copa) que corresponda, según muestra la imagen.
5. Jueguen con los demás integrantes del grupo de trabajo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario